Me avisaron de una revista académica que no publicarán uno de mis artículos porque está demasiado poético, y pues no cumple con los fines de la revista por "emotivo". Crítica aceptada. Hay que buscar fundamentar de una mejor manera aquello que proponemos.
Sin embargo, no puedo evitar percatarme de los argumentos con obvio tufillo positivista que utilizan y el hecho de que el lector o lectora intente ironizar el estilo, la originalidad y la finalidad por separarse del acartonamiento académico que demanda una escritura maquinal y sosa para ser validado. Precisamente eso es algo de lo que busqué alejarme al escribirlo.
Como si todas las personas que estudian un posgrado tuvieran que escribir con los mismos filtros lógico-ascépticos de la Ciencia con mayúscula. Eso sí que no me interesa.
Si una de las características de las ciencias sociales hoy es articularse como un diálogo de saberes, las lecturas no deberían cerrarse a sus formatos, de lo contrario más que diálogo de saberes, son monólogos condicionados a buscar siempre lo mismo en términos de escritura, argumentación y propuesta.
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